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-          La Pelota  -

Una pelota sola es, casi casi, una cosa inanimada.

Puede ser de plástico, goma, de caucho, con gajos, multicolor, naranja cómo la de basket, negra y chiquita cómo la de pelota paleta, blanca y saltarina cómo la del ping pong, muy bonita cómo la del mundial de Sudáfrica o bastante chota cómo la Tango de Argentina 78, de medias para jugar unas cabecitas en la pieza entre las camas y con las almohadas de arco, de papel para unos penales en el recreo…….

Puede ser de madera cómo las del hockey de pasto, maciza cómo las del hockeu sobre patines, livianita cómo una playera, pesada cómo una número de 5 embarrada en una gloriosa tarde de picado con lluvia intensa, indócil cómo una de rugby; a no ser que la maneje el Juani Hernandez; o muy mansita y a la vez envenenada cómo las que pasaban por los piés del Diego en el inolvidable Mexico 86….

Tal vez tenga los colores de tu equipo, o sea de un tono indefinido cómo consecuencia  de tanto castigarla, a los mejor la trajeron los reyes, la ligaste para el cumpleaños, vino de premio por un buen año escolar o la compraron con los pibes haciendo una vaquita con las donaciones de las Madres, a lo mejor es del gordito de la otra cuadra y hasta se ha dado el caso que la compró Don Carlos, el viejito de enfrente que se divierte viéndonos correr y gritar atrás de ella

Se puede llamar la caprichosa, cuándo va para dónde quiere y no para dónde nosotros pensamos, puede ser la malquerida cuándo la maltratan unos cuántos burros disfrazados de jugadores,  puede ser mansita y de vaselina  cómo la que puso el chileno en el segundo gol del Barsa, inesperada cómo la del gol de tiro libre del enorme Lio a los brazucas por debajo de la barrera, acariciada cómo cuándo pasa por los piés de Roman, de Gago o del Rolfi;  usada con criterio cómo la hace Maxi Rodríguez (alguien duda que es el mejor de Argentina en día de hoy ?) o despilfarrada cómo hace Racing cada vez que quiere ir al ataque..

Insisto, una pelota sola es un ser inerte.

Ahora, una pelota rodeada de pibes ansiosos por patearla aunque sea una vez, una que está picando en la puerta de la capilla al lado de la cancha de basket, la que entra en manos del referí en el inicio del clásico de la fecha, la que agarraba en una mano el Fede  Mendez antes de tirar un line, la que traía abajo del brazo el Gustavo cuándo se venía para el baldío de la esquina dónde hacía de local el poderoso Calle Saavedra antes del impresionante clásico con los de la calle Chile, la que usaban los Canarios de Constitución aquellos años que a fuerza de chancho/móvil y rifas truchas de un TV fueron al Torneo del Interior, las que habrán usado Franco antes que la metalúrgica propia  lo obligara a trabajar tanto, tal vez la que gastará Jonak en la tarde del Sábado tratando de sacudirse la birra de la noche del Viernes, seguro que Maxi tiene alguna y, fijate lo que te digo, hasta creo que Joncito también debe haber tenido alguna, igual que Leo en algún lugar de la Provincia de Bs As y, en una de esas, hasta Vlady (Don PPM) seguro que alguna vez la pateó….

Esas pelotas….. son otra cosa…… el tema es que no sé cómo describirlas……

Desde San Rafael, “Corazón de Mendoza”

Yayo

El que hoy se levantó con ganas de escribir