Las tácticas se optimizan en función de los propios jugadores y de los rivales a enfrentar.
Cuando uno es el fuerte se puede dar el lujo de meter mas gente del medio hacia arriba (3-5-2/3-4-3/4-3-3 o alguna otra).
Por otra parte hay que ver que el rival dispone de la opción de jugar un 4-3-3 o 5-3-2 con pases largos y esa es una buena alternativa para contrarrestar las mencionadas anteriormente.
Tambien hay que tener los jugadores adecuados para cada táctica. Se supone que si jugas pases largos, los defensas deberían tener un nivel digno de pases y los delanteros de velocidad.
Se pueden hacer muchas variantes, pero siempre recuerden: cuando suena el silbato al comienzo del partido encenderle la velita a San Quicho.